Instrumento emitido generalmente por instituciones financieras o bancarias que incorpora consideraciones ambientales, sociales y de gobierno corporativo (ESG) en su diseño, gestión y objetivos de inversión. Este tipo de productos pueden configurarse a través de diferentes estrategias o enfoques, ya que algunos pueden orientarse a invertir en empresas que cumplen con ciertos criterios ESG, mientras que otros pueden financiar proyectos específicos con impacto positivo en el medio ambiente o en la sociedad, como energías renovables, acceso a la vivienda asequible o proyectos de desarrollo comunitario. El objetivo de estos productos es el de generar retornos financieros al tiempo que promueven prácticas sostenibles y responsables. Algunos ejemplos de estos productos son los bonos verdes, los préstamos verdes o los fondos de inversión sostenibles.

Un modelo de negocio sostenible es aquel que considera explícitamente el medio ambiente y la sociedad como factor clave para generar valor, equilibrando las necesidades y demandas del presente sin comprometer las futuras. Buscan maximizar su impacto positivo a la vez que minimizar su impacto negativo en el medioambiente y en la sociedad.

Es un conjunto de políticas y acciones diseñadas para orientar y promover la inversión hacia actividades que contribuyan a la sostenibilidad económica, social y ambiental a largo plazo. Esta estrategia busca alinear el sistema financiero con los objetivos del Acuerdo de París sobre el cambio climático y los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas. Como parte de esta estrategia, se han desarrollado diferentes herramientas para llevarla a la práctica, como, por ejemplo, el desarrollo de diferentes estándares, la publicación de la Taxonomía o la Inversión verde o socialmente responsable.

Existen diferentes productos financieros que responden a la definición de sostenible, ya que incorporan a sus características criterios ambientales, sociales y/o de buen gobierno (ASG) para lograr rendimientos financieros competitivos a largo plazo y un impacto medioambiente positivo. Estos productos pueden ir desde fondos de inversión socialmente responsables, planes de pensiones sostenibles, bonos verdes o préstamos sociales. Para considerar la inversión o financiación en determinadas compañías y evaluar el desempeño de cada una, existen una serie de índices de sostenibilidad que puntúan a cada una en base a aspectos ASG. Algunos de ellos son el Dow Jones Sustainability World Index (DJSI World), FTSE4 Good Global 100 Index o MSCI, entre otros.

Según los Principios de Bonos verdes (GBP por sus siglas en inglés), definidos por la Asociación Internacional de Mercado de Capitales, los bonos verdes son cualquier tipo de instrumento de deuda en el que los fondos obtenidos se destinen exclusivamente a financiar (o re-financiar) de forma parcial o total proyectos verdes nuevos (o ya existentes. Estos deben contar con un beneficio medioambiental claro y estar alineados con los cuatro componentes de la guía de los GBP, que son: el uso de los fondos, el proceso de evaluación y selección de proyectos, la gestión de los Fondos y el informe.