El Economista se hace eco de la necesidad de homogeneizar las distintas taxonomías tanto en vigor como en proceso de elaboración que existen actualmente en numerosos países del mundo. Además de la taxonomía verde europea recientemente aprobada, otros 19 mercados preparan sus propias taxonomías, y los expertos aprecian grandes diferencias en lo que respecta a la calidad de los datos, el nivel de transparencia o la disponibilidad de los datos entre unas regiones y otras debido a la composición de la economía de cada país y de los retos que se hayan fijado.

Puedes leer el artículo completo en este enlace.