Según un reciente informe de la CNMV, la sensibilidad de los fondos de inversión españoles a una transición ecológica repentina es menor que la de sus pares europeos. El estudio se centró en cómo una economía baja en carbono se establecería aceleradamente en 2030 y utilizó los escenarios de la NGFS como base.

Si la transición es tardía, la economía sufriría un aumento brusco de los precios de carbono, que causaría una serie de shocks geográficos y sectoriales en la renta variable y los diferenciales de crédito. Según los resultados, una transición desordenada causaría en promedio una pérdida del -5,7% en los fondos españoles

Para seguir leyendo sobre este tema, puede hacerlo en este enlace.